on the sunny side of the street.

Este fin de verano lo hemos invertido (término económico) en cosas tan importantes como hacer crecer nuestra ilusión (término emocional).
 Por eso, nos apuntamos a un curso de Gestión Cultural de Guerrilla en Tres Serveis Culturals con Zemos98, un colectivo que investiga, programa y produce contenidos educativos y culturales usando herramientas de trabajo en línea y creando microcomunidades de colaboración temporales.
 Compartimos el curso con programadores y gestores culturales, políticos, artistas plásticos, editores, músicos, realizadores… y nos fuimos con algunos contactos más en facebook y una libreta llena de ideas y proyectos motivantes.

También asistimos a la presentación de la colección “Una historia d’amor a Mallorca” de la editora de papelería Sr. Ferrer para la que realizamos intervenciones en dos libretas y comprobamos cómo la calidad del trabajo del resto de colaboradores era directamente proporcional a la ilusión que Tina y Miquel destilan por su proyecto, y asistimos a un concierto en el salón de una vivienda del centro de Palma integrada en el generoso Cultura a Casa que programa contenidos culturales en espacios domésticos.
El coprotagonista del concierto, Sef, alter ego de Christian Fernández Mirón nos silbó melodías propias y una versión de “on the sunny side of the Street” al oído, parafraseando musicalmente a uno de los grandes filósofos de estos tiempos (y seguramente también uno de los más pequeños) cuando, al caérsele los dientes delanteros comprobó que apenas podía comer:
“…pero aún puedo silbar.”
A veces se nos olvida, pero es lo más importante.

Feliz otoño a todos, nos vemos en la acera soleada.